Samsara. La culminación de una trilogía filosófica
Overview
Nuevo documental del responsable de Baraka, filmado a lo largo de cinco años en veinticinco países de cinco continentes.
Resumen: Samsara intenta cerrar una trilogía a lo largo de décadas de trabajo y aprendizaje del director Ron Fricke. Algunos errores luego de más de una década de espera opacan la obra del director.Este largometraje, en su producto final, no presenta novedad alguna e incluso parece reutilizar algunas tomas utilizadas en Chronos. Más aún, también se presentan locaciones utilizadas en sus películas anteriores. Algo lamentable, considerando el excelente trabajo realizado por sus compositores.
Formato: Samsara fue lanzada en Blu-Ray en el 2011. Podría decirse que a nivel visual aún más elaborado a Baraka. Filmado en 70mm y escaneado a 8k, La calidad no deja nada que envidiar, sobrepasando incluso a su predecesor. A partir de las extras analizadas -un muy buen documental que compensa por la falta de comentarios del director- es posible entender más la visión de la obra. Fricke la considera una obra de meditación guiada.
Dirección: Samsara parece en el papel, según lo explica el director, tener la visión más madura de sus tres obras. Una obra de meditación guiada a través de música que complementa cuadro a cuadro las escenas seleccionadas. Esto último es destacable puesto que tanto Baraka como Chronos fueron trabajadas de forma inversa, lo que significa que la fotografía tuvo que amoldarse a la música compuesta con anterioridad.
Es una lástima ver al director reutilizar tomas y locaciones teniendo suficiente material del que hubiese podido echar mano. Otra situación que no queda claro en la dirección va de la mano con el primer acto de la obra. Durante los primeros treinta o cuarenta minutos de la película, esta parece desconectada entre si. Incluso podríamos decir, un poco forzada en su desarrollo. Sus cortes son bruscos y no generan el mismo impacto que la segunda mitad. Si debe rescatarse el hecho que Fricke realiza un tercer acto que culmina dando un cierre a las escenas anteriores y si podría decirse que llega a dejar satisfecho al espectador. Esto último es un aprendizaje plasmado en la obra pues culmina de mejor manera que sus dos trabajos anteriores.
A nivel de dirección, Samsara es una película que supera en concepto a sus obras anteriores. Madura en relación a Baraka, ofrece una excelente conclusión para el espectador, pero con algunos fallos que destiñen sus logros.
Fotografía: Uno de los puntos más altos de este filme es la fotografía. Fue filmada en múltiples locaciones en el mundo y la variedad entre ellas y similitudes que nos muestra, plantea una crítica a la sociedad misma que Fricke explota de gran manera. Decir que es más de lo mismo es dar por menos a la obra de este director pues visualmente demuestra su propia evolución. Así, sus retratos son más elaboradas, los timelapses más cortos y su transición en momentos de música acelerada, de lo mejor que nos presenta.
La primera parte es sin embargo floja, y no transmite la misma coherencia que el resto de su obra. Caso opuesto el final, donde logra amarrar todas las emociones transmitidas en sus escenas para concluir de forma magistral.
Banda Sonora: La banda sonora de Samsara es el punto más alto de la obra. Sutil, con hermosas transiciones que no se sienten bruscas al oído, el acompañamiento que realiza de la fotografía es exquisito.
A diferencia de la crítica realizada en Baraka, el crescendo de la composición termina de mejor manera y permite dirigir de mejor manera al espectador a reforzar el sentimiento que el director a buscado. También es rescatable la originalidad de la música, que no recuerda a Baraka y por ende, se sostiene por si sola.
Probablemente, el cambio en la estrategia de composición tuvo un impacto en este resultado, pero lo cierto es que sea lo que sea, ha sido para bien.
Narrativa: El director nos lleva en un viaje que él mismo denomina como una meditación guiada. Sin embargo, a diferencia de sus obras anteriores, la crítica, los simbolismos y significados de muchas de sus tomas no queda tan clara. No significa esto que la obra no sea profunda ni pertinente de análisis. Por el contrario, algunas tomas por si solas plantean críticas sociales fuertes en nuestra sociedad actual. El problema yace aquí en el hecho que estas por si solas, no logran amarrar cohesivamente la obra e indudablemente no puede evitar compararse a sus anteriores trabajos.
No debe el director guiar al espectador de forma completa, sin embargo, si debe asegurarse que su obra transmita de forma cohesiva la visión que le comparte. Es aquí donde yace la principal falencia de esta película. Debe analizarse por si sola y aquí, el espectador podría sentirse desorientado o simplemente satisfecho de ver “tomas bonitas”. La obra, estoy seguro, fue diseñada para mucho más, pero falla en ser consistente a lo largo de sus 100 minutos.
Unicidad: Samsara es un hermoso regreso al género que Fricke exploró décadas atrás, pero no es más que eso. Es un gran avance en términos de edición donde la obra fluye más armoniosamente con la composición pero la narrativa se escapa por los azulejos de su fundamento mismo. Es una obra que todo cinéfilo debe observar, y claro, cualquiera que aprecie la fotografía debe ver la trilogía de Fricke. Sin embargo, pasar de eso a decir que la obra plantea una crítica sociológica-filosófica que complementa la parte auditiva y visual es un reconocimiento que este filme no logra por más que lo intenta.
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